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Seis decisiones que debes tomar para envejecer bien

Seis decisiones que debes tomar para envejecer bien

Tiempo de lectura: 3 minutos

La Universidad de Harvard publicó recientemente un artículo que destaca algunas decisiones / elecciones en las que las personas deben pensar a medida que envejecen y envejecen de manera segura.

No basta con comer bien, hacer ejercicio y hacer chequeos para un envejecimiento saludable, según este artículo. Tienes que preocuparte por seis cuestiones que muchas veces pasan desapercibidas para la gente. Los presentaremos y haremos algunos comentarios sobre ellos.

1) El primero se refiere a la adecuación de la casa. A medida que envejecemos, los cambios sensoriales y motores hacen que debamos preocuparnos por cosas como rejas en los baños para la asistencia a la hora del baño, escaleras con pasamanos adecuados, alfombras y muebles que pueden provocar desequilibrios y lesiones, entre otros. Adaptar el hogar al proceso de envejecimiento es uno de los principales puntos que ayudará a una vejez saludable y a la prevención de caídas.

2) Por cierto, la prevención de caídas es el segundo tema que destaca el artículo. Las caídas pueden provocar fracturas, discapacidades e incluso la muerte. El miedo a volver a caer es una de las causas del aislamiento social de las personas mayores y es en el interior de la residencia donde se produce el mayor número de accidentes. En este ítem, no solo se debe pensar en la seguridad en el hogar, sino también en ejercicios físicos para fortalecer los músculos y mejorar el equilibrio y la accesibilidad en nuestras ciudades y barrios.

3) La tercera pregunta se refiere a dónde vivir. Las personas deben considerar dónde y con quién quieren vivir. Los barrios y las ciudades, las repúblicas, las comunidades, las residencias o en su propia casa amigables para las personas mayores son opciones posibles. Para cada una de estas elecciones, es necesario pensar en la red social además de la familia, ya que no siempre envejecemos con nuestros familiares o ellos estarán disponibles para cuidarnos cuando sea necesario.

4) Pensar en quién nos ayudará en la cocina, en las compras, en el mantenimiento de la casa, en el pago de las facturas, entre otros quehaceres diarios, cuando esto se vuelva indispensable, es el cuarto tema que debemos preocuparnos y está directamente relacionado con la pregunta antes mencionada. sobre elegir dónde y con quién vivir.

5) La siguiente y quinta pregunta se refiere a las pautas de voluntad anticipadas, es decir, qué cuidados queremos o no que se nos den cuando estemos en la fase final de la vida. Esta es una preocupación que muchas veces pasa desapercibida, inhibidos como estamos por el miedo a la muerte, pero que cada día cobra mayor relevancia.

6) Finalmente, la sexta pregunta se refiere a un plan de emergencia. ¿A quién llamar en caso de emergencia? ¿Hay alguien que pueda visitarnos con frecuencia para comprobar si estamos bien o si lo necesitamos? ¿Dejamos los números de llamada de emergencia visibles y disponibles para su uso si es necesario? ¿Qué tan accesible es el teléfono? ¿Tenemos un sistema de alarma personal?

Estas son preocupaciones importantes que a menudo ni siquiera abordamos a medida que envejecemos. Pero, si queremos envejecer de forma activa y saludable, es hora de preocuparnos por ellos. ¿Ha tomado alguna decisión al respecto?